Los Trabajadores del Sector Público, nos encontramos continuamente capturados por el interés del sector del duopolio que administre el Estado. No obstante, ambos sectores se encuentran subordinados al interés empresarial, como hemos podido observar en los casos PENTA o SQM.
Y tan así es, que en relación a las politicas publicas a impulsar sus diferencias estan dadas basicamente por que unos pretenden la menor regulacion posible al sector privado (Chile Vamos), mientras sus adversarios plantean regulaciones que permitan darle legitimidad al modelo de acumulacion de capital (Nueva Mayoria).
En ambos casos, hay un consenso politico y economico que desde 1990 mantiene la institucionalidad politica y el modelo neoliberal, por lo que respecta a los Trabajadores Publicos unos y otros defienden no solo la precariedad laboral en el Estado, sino que la externalización de la función publica en fundaciones privadas vinculadas al duopolio.
En este sentido, las instituciones del Estado se encuentran secuestradas por el interés politico y empresarial de una casta duopolica que en sus diferencias pugnan por sostener la hegemonia del empresariado sobre la sociedad.
Es por esto que todo esfuerzo de cambio en Chile -por minimo que este sea- presupone un cambio en las correlaciones de fuerza entre el empresariado y el resto de la sociedad. Y esto para los Trabajadores del sector publico significa no solo luchar contra la precariedad laboral y la falta de carrera funcionaria sino por reentender el rol de lo publico.... y como el Estado y la sociedad autonoma del interés empresarial o duopolico van generando alternativas de politica publica que contraresten la vision y el poder del empresariado sobre la sociedad.
De ahi, que los Mov.Sociales y los empeños politicos transformadores tienen el deber de recuperar las instituciones para la ciudadania, no solo por una apuesta electorera, sino para empezar a cambiar las correlaciones de fuerza entre la alicaida (pero aún bien entronizada en el Estado) casta politica-empresarial y la emergencia de una sociedad autonoma.
Todo lo cual debiera impulsarnos a nuclearnos en nuestros espacios gremiales para pugnar tanto en la cancha grande de la Anef como en cada una de los gremios y servicios del Estado.
