sábado, 28 de abril de 2012

Partió el 2012...



Y Partio el 2012...el cierre del año pasado del Movimiento Estudiantil se caracterizó por no lograr ninguna victoria material concreta y sin embargo, su gran exito aparece en el ámbito de lo símbolico. Logro abrir un espacio para la articulación de una fuerza social que pugnara por una nueva hegemonia en la sociedad, una nueva educación y la necesidad de un cambio politico.  Lo que no es poco...y que tras meses de lucha necesariamente daria paso a un período de reflujo del movimiento para evaluar, cumplir academicamente y proseguir su andar. Reflujo en todo caso que no significo del todo desmovilización, los sectores mas conscientes y organizados del movimiento universitario y secundario estuvieron apoyando la lucha de Aysen y contra las represas en la Patagonía en las calles. 

Este reflujo era la principal preocupación del movimiento social dado que las convocatorias que calentaron motores a la primera marcha estudiantil del año el 25 de Abril, no fueron muy prometedoras...en ese contexto, desde la Moneda desgastada tras el conflicto en Aysen, a diferencia del año pasado cuando Lavin soslayo el inicio del Movimiento Estudiantil, el ministro Beyer pone sobre la mesa una reforma al sistema de financiamiento de la educación superior con la clara finalidad de desactivar el conflicto estudiantil. Lo que vendría acompañado además por una propuesta de ajuste tributario del gobierno con la finalidad de terminar de deslegitimar al Movimiento Estudiantil, haciendo una fuerte apuesta mediatica por legitimar sus propuestas a través de los medios de comunicación (casi todos oficialistas) sin embargo, las propuestas gubernamentales van en el sentido contrario de las demandas estudiantiles y apuntan a terminar de destruir la educación pública, lo que no puede sino apuntalar la movilización social.    

Sin embargo, la expresión multitudinaria de la marcha estudiantil del 25 de Abril,  cerro de sopetón  las dudas acerca de la duración del reflujo del Movimiento Estudiantil, a diferencia del año pasado no se dió un proceso escalonado de masividad, lo que habla a todas luces de la fortaleza del Movimiento Estudiantil y que se encuentran en un escalón diferente al del año pasado, donde a la masividad del  movimiento social por la educación ( la CONFECH, la ACES, la CONES y la CORPADE) aún les queda por ver como lograr articular un Bloque Social que integre otros sectores sociales para articular la suficiente fuerza para lograr imponer sus propuestas.

En esto cabe señalar, que la experiencia del año fue compleja dado el mayoritario apoyo ciudadano a las demandas del movimiento estudiantil, se pensó y se actuó (dada la fuerza que tenía el PC en el movimiento) en función de una alianza con actores sociales como la CUT y el Colegio de Profesores que daría una potencialidad de masas que haria insostenible la situación para el gobierno. Tal situación no sucedió quedo en evidencia la fortaleza interna del Movimiento Estudiantil y la debilidad organizativa del resto del mundo social.



Y es que la CUT y el Colegio de Profesores como organismos de representación gremial  no representan del todo la realidad y las aspiraciones del mundo de los trabajadores y los profesores. Ahi es donde los estudiantes deben ser capaces de articular alianzas que de verdad les sirvan a sus fines y los del proceso de cambio mas profundo que representan...la CUT dirigida por Arturo Martínez no es más que un sindicalismo añejo ajeno a las dinámicas democráticas y participativas del Movimiento Estudiantil, otro tanto podemos decir del Colegio de Profesores donde Jaime Gajardo no ha sido capaz de responder a la ofensiva del gobierno y la ultraderecha a la labor docente. Ambas dinámicas organizacionales aún obedecen a las relaciones de fuerzas ordenadas con el inicio de la transicion -con una sobrerepresentación comparativa del PC- bajo los marcos de la institucionalidad y más allá de lo discursivo con un fuerte componente gremial-corporativo práctico. Con estas fuerzas hegemonicas en la CUT y el Colegio de Profesores la suma para la profundizacion de las luchas sociales y una real alianza social no es tal y lo demostro el fracaso del llamado a Paro Nacional del 18 y 19 de Octubre  que termino más bien como una jornada de protesta estudiantil el año pasado y que marco el declive del movimiento de masas.

Este escenario requiere un abordaje diferente al asumido hasta ahora por la conducción estudiantil y es posible en la medida que la incidencia del PC en la Confech se ha visto disminuida tras las elecciones de Federaciones desde fines del 2011 y donde sectores Autonomistas y de Izquierda independiente se volvieron predominantes. En este sentido, no basta con  mirar la relación Educación-Estado en sentido reivindicativo, sino -y en la mira de la articulación de un Bloque Social de Masas capaz de imponer sus terminos al gobierno empresarial- es necesario poner enfasis en la relación Educación-Sociedad que es el campo donde poder construir una nueva hegemonía politica-ideologica en la sociedad...